Es difícil analizar lo que ha pasado con este equipo en estos días. Lamentablemente no he podido ver todos los partidos, enteros y con tranquilidad. Lo importante es que es el ciclo se ha cerrado, que no es que se haya acabado. Se consiguió el Mundial en Japón, se obtuvo la plata en los Juegos Olímpicos y ahora, tras perder la oportunidad en casa hace dos años, se ha ganado el Europeo en Polonia.
El bloque era muy parecido al de otras ocasiones victoriosas. Faltaban Pepu y Aito, sustituidos por Scariolo. No sé si fue la improvisación táctica, las lesiones, especialmente, la de Pau, quizá el vernos campeones antes de empezar o simplemente la falta de ritmo de competición... o también puede ser que la renovada Serbia empujó a los nuestros al borde del abismo y del bloqueo mental... Abrieron una caja de los truenos, vimos a una selección vulnerable.
El Reino Unido estuvo cerca de ganarnos y Eslovenia forzó la prórroga cuando se ganaba por 15 puntos. Turquía ganó un partido en el que la última jugada se la jugó Llull y Marc dijo algo que pensamos todos, pero que quizá no se tenía que haber dicho.
Lo dicho, si es difícil saber qué fallaba, también es difícil saber cómo se solucionó, pero hubo que esperar a hacer un mal primer cuarto con Lituania y solucionar el segundo con 23-0. Volvió la defensa fuerte y el contraataque a velocidad de vértigo. Volvió el acierto en el tiro exterior. Se cerró el rebote y volvieron las ideas en ataque. Pau haciendo de todo, Navarro y Rudy saliéndose en el tiro exterior, Marc y Reyes en la zona, Ricky...
Polonia no fue rival, la inmaculada Francia de repente recordó que venía de la previa, Grecia no supo salir de su dinámica de partidos trabados resueltos con menos de 100 puntos entre ambos equipos y hoy Serbia, simplemente no ha podido y su lucha estaba en evitar perder por los 31 puntos de máxima diferencia en una final.
El ciclo se ha cerrado. Esta generación ha cumplido y todo lo que se obtenga a partir de este punto será para nota.
Mi recuerdo es para todas aquellas selecciones españolas que nos hicieron soñar, pero que vivieron estos partidos desde el lado del perdedor o dando por bueno que era mejor despedirse ganando el tercer puesto que perdiendo la final. A los que ganaron en Saitama, merecieron ganar la final olímpica y han ganado hoy en Katowidze, simplemente gracias.
Un saludo
Jesús (a.k.a. Abu)
El bloque era muy parecido al de otras ocasiones victoriosas. Faltaban Pepu y Aito, sustituidos por Scariolo. No sé si fue la improvisación táctica, las lesiones, especialmente, la de Pau, quizá el vernos campeones antes de empezar o simplemente la falta de ritmo de competición... o también puede ser que la renovada Serbia empujó a los nuestros al borde del abismo y del bloqueo mental... Abrieron una caja de los truenos, vimos a una selección vulnerable.
El Reino Unido estuvo cerca de ganarnos y Eslovenia forzó la prórroga cuando se ganaba por 15 puntos. Turquía ganó un partido en el que la última jugada se la jugó Llull y Marc dijo algo que pensamos todos, pero que quizá no se tenía que haber dicho.
Lo dicho, si es difícil saber qué fallaba, también es difícil saber cómo se solucionó, pero hubo que esperar a hacer un mal primer cuarto con Lituania y solucionar el segundo con 23-0. Volvió la defensa fuerte y el contraataque a velocidad de vértigo. Volvió el acierto en el tiro exterior. Se cerró el rebote y volvieron las ideas en ataque. Pau haciendo de todo, Navarro y Rudy saliéndose en el tiro exterior, Marc y Reyes en la zona, Ricky...
Polonia no fue rival, la inmaculada Francia de repente recordó que venía de la previa, Grecia no supo salir de su dinámica de partidos trabados resueltos con menos de 100 puntos entre ambos equipos y hoy Serbia, simplemente no ha podido y su lucha estaba en evitar perder por los 31 puntos de máxima diferencia en una final.
El ciclo se ha cerrado. Esta generación ha cumplido y todo lo que se obtenga a partir de este punto será para nota.
Mi recuerdo es para todas aquellas selecciones españolas que nos hicieron soñar, pero que vivieron estos partidos desde el lado del perdedor o dando por bueno que era mejor despedirse ganando el tercer puesto que perdiendo la final. A los que ganaron en Saitama, merecieron ganar la final olímpica y han ganado hoy en Katowidze, simplemente gracias.
Un saludo
Jesús (a.k.a. Abu)
¡Qué buenos son cuando quieren!
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