SDLog: Así no podemos caer

 

Reconozco me sale urticaria cada vez que veo cambiar entrenadores. Como seguidor del Atleti, me vienen a la memoria los peores años del gilismo (por eso lo odio tanto). Sí, alguna vez he querido que pierda mi equipo para que alguien nuevo tuviera la oportunidad de dar con la tecla, y no venían entrenadores top casi nunca. Hoy no sé qué pensar, por el Atleti y su n-ésimo desatino ayer en Cádiz, pero sobre todo por nuestra SD Logroñés.

Estamos demasiado acostumbrados a los grandes presupuestos, a los clamores populares, a los fichajes de campanillas, a las grandes destituciones... El caso es que no hay tiempo y seguramente tampoco recursos. Hay que tirar con lo que tenemos. Dos destituciones son suficientes. Si hay soluciones no pasan por otro finiquito y por otro discurso. Dudo que haya un milagro en una nueva contratación y menos a estas alturas. El corazón pide otra cosa, pero tiene que ganar la cabeza. 11 partidos y tirar con lo que hay.

Aún así, vivimos en un vendaval constante. Brotes verdes en los partidos ante el Sabadell, Cornellà, Arenteiro y dudas cuando no encefalograma plano ante el Depor o ayer ante el Teruel. Hay bajas, pero también jugadores que se quedan incomprensiblemente en el banquillo o cambios extraños. Algo más pasa. ¿El qué? ¿Tiene arreglo? Que el Depor te destroce es normal. El Teruel puso ganas y buenas maneras, pero no me pareció inabordable. Por algún motivo ayer nos faltó personalidad.

Quiero seguir soñando, quiero ver las posibilidades de permanencia, quiero ver cada partido con la ilusión de ganar. Al fin y al cabo todo rival con más o menos presupuesto pone 11 tipos a jugar como los nuestros. El partido no puede acabarse por un gol en contra. Asumo que estamos por encima de nuestras posibilidades, que descender es una posibilidad muy real, pero no puede ser de esta forma. Tenemos para al menos, hacerlo de una manera digna. Si caemos, que sea luchando.

Pero el problema no está sólo en el vestuario. Seguimos los 1500 de siempre. Los que viajamos, los voluntarios, los que van a las asambleas, los que están en la directiva... ¿somos diferentes a otros aficionados? Me temo que no. Tenemos ese componente agonías que tiene cualquier aficionado al fútbol. Sabemos quejarnos y ver los errores o las carencias. Vemos el tortazo antes de que llegue. Quejarnos, en definitiva. Incluso creo que estamos dispuestos a matar a aquellos que dejan su tiempo y su ilusión.

Qué rápido hemos olvidado todos los aciertos y todas las decisiones que nos han llevado hasta aquí. Se les puede criticar y podemos dudar pero sus errores son los míos (creo que de estar ahí tendría errores mucho mayores). El fútbol es apostar y cuando llevas un club son muchas las cosas en las que te puedes equivocar. Pero hay líneas rojas que se han traspasado y lo que es peor... se ha hecho por algo que puede llegar pero todavía no ha pasado. Cayendo en el riesgo de la profecía autocumplida. Tampoco es manera de caer.

No estoy llamando a la resignación, estoy pidiendo responsabilidad, respeto y realismo. A los profesionales les pido entrega y lucha. A mi gente, a los que comparten grada conmigo cuando puedo viajar, les pido comprensión. No hay milagros. 

Ah, el 50 +1 es loable pero no hay inversores desinteresados o están ya pillados. Hay inversores que quieran tener el control y luego hay muchos jetas. Sigamos pues nuestro camino sin cerrar puertas pero conscientes de que nuestra esencia es vivir con lo que tenemos.

Un saludo del Abu 

Atleti: Esto es lo que hay...

Hubiera tenido que escribir esta entrada hace meses, te vienen las ideas, los cabreos, las alegrías... tengo asumido que el Atleti es un carrusel de emociones, que tenemos el corazón entrenado y a prueba de bombas. Que un mes podemos vernos en mitad de tabla en liga y a la semana siguiente nos vemos llegando a semis de Champions. Ver ganar dos derbies seguidos en casa o perder en cierto trofeo oficial en Arabia con ellos...

Así es la vida del seguidor de este santo club. Pero nos están añadiendo algo a este fatalismo resignado. Miguel Ángel Gil, consejero delegado que cobra un porcentaje sobre la cifra de negocio cada año, sólo es responsable de los comunicados que emite. Si la planificación deportiva es desastrosa, si el equipo no da más de sí o se omite tal circunstancia o directamente el responsable es el Cholo Simeone, que como estamos viendo se las ve y se las desea para acomodar los jugadores que tiene a las posiciones que necesita. Si acierta todo ok, si falla son ataques de entrenador. Para eso gana un pastón. En ese sueldo sigue estando la función de paraguas de la propiedad.

El caso es que todos veíamos las carencias ya desde tiempo inmemorial. La historia del 5 y del 9 que eran necesarios, casi imprescindibles. La ausencia de Reinildo por lesión, los años de Savic, las continuas lesiones de Giménez... y la tendencia a fichar jugadores en otro tiempo soñados hoy ya cargados de años como Azpilicueta o Witsel, por cierto hoy convertidos en centrales por necesidad.

Se empezaron a ganar los partidos, sobre todo en casa, llegaron los records de partidos de Koke y de goles de Griezmann y las dudas a los grandes. A todos nos entró el cosquilleo de mi buen amigo Tomi. El espejismo se basaba en el fantástico año de Morata (en vez del 9 que tenía que venir), la consagración de Pablo Barrios (en palabras de Simeone, el 5 que necesitaba) y la explosión de Riquelme y Lino. Koke restablecido de su lesión volvía a dar pases de antología y Griezmann iba a lo suyo. Ah, Witsel cumplía en la defensa y Hermoso alternativa partidos de nervios con partidos serios.

Había que fijarse muy bien para ver que Saúl y Correa han ido desapareciendo, que Memphis jugaba un partido para perderse seis (algo parecido le sigue pasando a Giménez), que Nahuel se ha vuelto a perder y que De Paul es un complemento, pero no ese jugador de jerarquía en el que encontrar liderazgo y soluciones.

Tuvo que llegar la lesión de Pablo Barrios en Rotterdam y todo se hundió. El fuelle se le acabó a Koke y la defensa se mostró realmente desnuda. Eso sí, hay que reconocer que el gol no cuesta este año. Pero el caso es que ir fuera del Metropolitano es un drama. La liga se fue a 10 puntos tras perder ante el Girona. 

Cuando escribo esto se va Grbic y viene un rumano para la portería. Correa parece haberse hartado de ser el revulsivo (algo me dice que no ha sabido evolucionar y madurar, pero vamos a echar de menos su compromiso y su calidad) y quiere aprovechar el tirón árabe. Javi Galán y Soyuncu tienen su ración de rumores como lo hay para posibles altas. Si no hay oficialidad mi fatalismo me lleva a no fiarme y a recordar que ya acabamos una temporada con 17 o 18 jugadores... No me olvido de las renovaciones pendientes...

El mercado de invierno es de descarte y de remiendos. De momento esto es lo que hay. El Inter en Champions dentro de unas semanas, mañana el Sevilla en Copa y la liga... pues eso... a cerrar el cuarto puesto al menos. Que no venga Mateu Alemany me decepciona y habrá que ver qué hacen Óscar Mayo y Carlos Bucero (¿les dejarán trabajar y llevar a cabo sus ideas?).

Un saludo del Abu

SDLOG: A lo hecho pecho...

Partido número 20 de la temporada... Nada sale, con poco los rivales marcan, cuatro partidos perdidos y sin hacer un gol y encima llevamos dos jornadas en puestos de descenso. Vamos a ver cómo diablos explico todo lo que está pasando, si bien, creo que se puede salir del pozo y no dedicarnos a quemar las redes y a buscar culpables.

Ya en mi anterior post hablé de la despedida de Jordi Fabregat y por el camino se ha quedado Andrés García. Más o menos me han explicado los motivos que dicho rápidamente se podría explicar como falta de adaptación a la plantilla. En la plantilla se han caído Edu Martínez (al que se dió la baja) y Toni García (se ha marchado al UCAM de Murcia).

Teníamos claro (y el que no, se engañaba) que la transición por la marcha de Raúl Llona y Miguel Chocarro iba a ser dura. Ambos se marcharon, por un sueldo mayor, pero además, por la búsqueda de un proyecto más amplio, con más presupuesto y más medios. Podría hacerse el esfuerzo de subirles el sueldo, pero el presupuesto de la plantilla sin haber crecido en socios... era inviable. Endeudarse no es una opción. Este club sale a comido por servido cada año y no genera de ninguna manera para amortizar un préstamo. El lastre sería pan para hoy y hambre, cuando no desaparición, para mañana. 

La apuesta por Juanma Barroso es obvio que no ha salido bien. Había que apostar con nuestros medios. Si vemos la plantilla, se ha demostrado que tiene grandes carencias, sobre todo en el centro del campo. Javi Castellano está muy solo en la creación y a pesar del esfuerzo la edad pasa factura, le falta (Arratia no lo es) uno o dos socios que hagan la brega y las coberturas a la defensa. Además, sólo Óscar Fernández es extremo puro y con carácter y empuje para desequilibrar por banda. 

Evidentemente no se le pueden achacar la lesión de Dani Garrido en el centro del campo y la de Rubio (ésta hasta final de temporada, al menos Dani está para volver en breve) en la delantera. Es probable que Jordi Escobar haya bajado el rendimiento por ambas ausencias. Por cierto, tengo mis serias dudas de que alguien pague un traspaso aceptable por él, cuando en unos meses será libre. Además habría que cubrir el hueco.

El principal problema es haber tenido tres entrenadores y no han juntado del todo las piezas. Barroso apostó por Fabregat y luego llegó (ya no tengo tan claro si fue apuesta suya) Andrés García. Aitor Larrazábal tiene que crear sin pretemporada y con el 50% de la temporada ya consumida. Su frase "el que no es contundente hoy, no lo va a ser en una semana" deja claro que hay mucho trabajo por hacer. El descubrimiento del canterano Alex Martínez Jaráiz y las llegadas de Jannick Buyla (ahora en la Copa África) y Ferni han ayudado, pero habrá que peinar bien el mercado y conseguir refuerzos para cubrir las bajas. Como poco un mediocentro defensivo o dos. Alguien arriba sobre todo si se va Escobar...

Pesan mucho las carencias y las bajas, pero aún así creo que hay mimbres. Hay un buen portero, buenos defensas y hay calidad para crear y rematar. El partido en Tajonar y el de la Ponferradina muestran que el equipo entra muy frío a los partidos y eso le mata, en defensa necesita trabajo urgentemente. Ayer en Majadahonda un rival con problemas marca un gol con fortuna y otra vez llegan los males. Esa dinámica sólo se elimina con al menos un buen partido y sobre todo con resultados.

Lo he dicho más de una vez, pero debo repetirlo. Hay un círculo vicioso que es difícil de romper. Fichamos barato, hacemos contratos cortos, les hacemos crecer... y es casi imposible renovarlos. Muchos de ellos aprovechan la ocasión. Es difícil repetir el milagro con más de 14 bajas cada año. No creo que sean malos jugadores, pero tras estos años seguramente no sean tan buenos, como los Soberón, Calderón, Borja Martínez, Víctor Ruiz, Diego Esteban, Samanes, Sarriegi, Jero... de los que también puede decirse que buscan sueldo... pero también proyecto.

En fin, a lo hecho pecho. Quedan 18 partidos. Hay que seguir confiando... y seguir soñando (malditos). Empezamos otra vez el sábado contra el Sabadell. 

Un saludo del Abu