Es la noticia del día. Italia se ha quedado fuera del mundial en una eliminatoria de repesca con Suecia que tampoco parece ser parecido ni mucho menos al equipo que llegó a ser tercero en el mundial del 94, sino más bien un sucedáneo de lo que representa la Italia actual. Un equipo correoso, que aguanta al rival y que tácticamente tiene poco que decir.
Personalmente Italia siempre ha sido un coco. No sé qué era lo que más odiaba y lo que más temía. Las cerdadas tipo Dino Meneghin en baloncesto o la de Tassotti en aquel mundial de EE.UU. de la mano de la permisividad arbitral o ese juego tan feo basado en la defensa con jugadores de gran técnica que hubieran podido dar otras muchas solunciones.
Durante muchos años, Italia fue ese equipo que siempre pasaba eliminatorias, especialmente contra nuestra selección, o fases de grupos empatando. Creo recordar que estuvieron a punto de pasar con tres empates en los tiempos de tres puntos... El caso es que siempre estaba ahí, siempre llegaba, aún no ganaba, nadie le quitaba de los favoritos.
Pero llegaron a la final del mundial y luego a la final de aquel europeo. Y me temo que no vieron las señales. No creo que Gian Piero Ventura sea el culpable único, pero en tiempos difíciles, se hace necesario un tipo que invente, que se rebele contra las inercias y las cuestas abajo. Y de lo que he visto a la selección italiana, me ha parecido un entrenador preso del pasado, de algún complejo, del ya saldrá y sobre todo sin ninguna personalidad, porque no terminan de apretar ni de defender bien.
Si hay algo que me da miedo, sobre todo cuando vuelvo la vista al Atleti, es esto. Ser irrelevante. No saber a qué juegas. Siempre tienes que hacer algo bien, algo en lo que debes hacer daño al rival. La defensa, el ataque, el pase, el tiro, el balón parado, vender pipas, lo que sea...
Hoy he leído/escuchado lamentos. Yo me acuerdo de uno de mis ídolos. Gianluigi Buffon. Hubiera sido su sexto mundial. Por lo demás, lo de siempre. Seguramente Suecia no pinte nada y con Italia algo hubiera pasado. Yo, les seguiré temiendo/odiando y sobre todo respetando hasta que el árbitro no pite el final. Se les echará de menos.
Creo que para el futuro necesitan un entrenador que, sin perder su identidad, aproveche los buenos jugadores y su calidad. Bueno, ellos verán. El mundial lo verán desde la playa. El futbol no premia el nombre y sobre todo cuando llevas tiempo haciéndolo mal.
Arrivederci Italia.
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