Con nuestras dudas a cuestas, llegaba el primer envite de entidad de nuestra selección (por cierto la furia pertenece a Quincoces, Gainza, Zarra y otras glorias del pasado , “a mí, Sabino que los arrollo”, lo de la roja me parece muy bien, pero yo siempre he dicho y escuchado, la selección). Enfrente CR9, Simao, Meirelles, Carlvalho… un buen equipo que presentaba trazas de buena defensa y calidad y peligro arriba.
Ayer Xavi se hizo con el control, Iniesta volvió a salirse y Alonso y Busquets estuvieron en todas partes. No sé si llegaron al nivel más alto y se quedaron sin ideas al paso de los minutos, pero se acercaron a lo que estábamos buscando. Toque y criterio. El problema es renunciar a los Pedrito, Silva, Mata… ay, las bandas (por mucho que lo suplamos con Ramos desde la defensa y Villa). Nos quedamos con los 30 metros centrales del ancho del campo y al final te estrellas contra el muro y no tienes alternativas. Si no somos previsibles de inicio lo acabamos siendo con el paso de los minutos. La defensa muy bien, cuando tuvo que fajarse y en las subidas al ataque. Genial Piqué sacando la pelota, Puyol al corte, Capdevila apareció, por fin, y Sergio Ramos perfecto.
Villa… simplemente es el gol. Se ha hecho con la banda izquierda y el centro y va sobrado desde atrás. Los cuarenta millones que ha pagado el Barça van camino (dentro de este loco mundo, tan lejano de la realidad cotidiana y de la crisis, no, no me la olvido) de ser calderilla. Torres sigue buscando el ritmo y la forma perdidas. Quiero consolarme pensando que desgastó a la defensa rival, pero sólo le recuerdo el tiro del principio del partido, unos cuantos errores de control y, sobre todo, su cambio.
La salida de Fernando Llorente, fue clave. Entiendo que no es un delantero tanque como parece al verle, pero no entiendo la brecha causada. Quizá fue el desconcierto al verle, quizá salir y tener una ocasión tan rápida, quizá que Sergio Ramos se desmelenó justo en ese momento (bien por iniciativa propia, bien por instrucción de del Bosque) pero llegaron cuatro ocasiones seguidas y el gol. Lo cierto es que fue en ese momento y que fue un gustazo ver al chaval cubrir con toda su envergadura la pelota y le creaba un pandemónium a la defensa portuguesa.
¿Los portugueses? Lo siento mucho. No tengo gran opinión de Queiroz y me ratifico. Un equipo ramplón a pesar de la calidad que atesora, buscando el 0-0 o una oportunidad en alguna contra. Que lo haga Suiza, lo entiendo. A malas, defender forma parte del juego, pero hay que acompañarlo de algo, una amenaza constante, que mine al rival y no hubo más que bandazos tácticos y cambios sin ton ni son… Tienen jugadores de calidad en todos los puestos (vale, les sigue faltando un delantero) y pueden jugar a algo más. Por cierto, el portero
En fin, lo siguiente no es Alemania, ni Argentina, ni Brasil… (yo mismo he cometido ese error varias veces) que, por cierto, tienen que ganar sus partidos. Es Paraguay, que ya nos dieron un disgusto en el mundial de Francia. Siguen siendo defensivos, pero arriba tienen mejores jugadores arriba que antes. Será un partido difícil en el que un previsible y nuevo atasco nos puede dar disgustos.
Ayer Xavi se hizo con el control, Iniesta volvió a salirse y Alonso y Busquets estuvieron en todas partes. No sé si llegaron al nivel más alto y se quedaron sin ideas al paso de los minutos, pero se acercaron a lo que estábamos buscando. Toque y criterio. El problema es renunciar a los Pedrito, Silva, Mata… ay, las bandas (por mucho que lo suplamos con Ramos desde la defensa y Villa). Nos quedamos con los 30 metros centrales del ancho del campo y al final te estrellas contra el muro y no tienes alternativas. Si no somos previsibles de inicio lo acabamos siendo con el paso de los minutos. La defensa muy bien, cuando tuvo que fajarse y en las subidas al ataque. Genial Piqué sacando la pelota, Puyol al corte, Capdevila apareció, por fin, y Sergio Ramos perfecto.
Villa… simplemente es el gol. Se ha hecho con la banda izquierda y el centro y va sobrado desde atrás. Los cuarenta millones que ha pagado el Barça van camino (dentro de este loco mundo, tan lejano de la realidad cotidiana y de la crisis, no, no me la olvido) de ser calderilla. Torres sigue buscando el ritmo y la forma perdidas. Quiero consolarme pensando que desgastó a la defensa rival, pero sólo le recuerdo el tiro del principio del partido, unos cuantos errores de control y, sobre todo, su cambio.
La salida de Fernando Llorente, fue clave. Entiendo que no es un delantero tanque como parece al verle, pero no entiendo la brecha causada. Quizá fue el desconcierto al verle, quizá salir y tener una ocasión tan rápida, quizá que Sergio Ramos se desmelenó justo en ese momento (bien por iniciativa propia, bien por instrucción de del Bosque) pero llegaron cuatro ocasiones seguidas y el gol. Lo cierto es que fue en ese momento y que fue un gustazo ver al chaval cubrir con toda su envergadura la pelota y le creaba un pandemónium a la defensa portuguesa.
¿Los portugueses? Lo siento mucho. No tengo gran opinión de Queiroz y me ratifico. Un equipo ramplón a pesar de la calidad que atesora, buscando el 0-0 o una oportunidad en alguna contra. Que lo haga Suiza, lo entiendo. A malas, defender forma parte del juego, pero hay que acompañarlo de algo, una amenaza constante, que mine al rival y no hubo más que bandazos tácticos y cambios sin ton ni son… Tienen jugadores de calidad en todos los puestos (vale, les sigue faltando un delantero) y pueden jugar a algo más. Por cierto, el portero
En fin, lo siguiente no es Alemania, ni Argentina, ni Brasil… (yo mismo he cometido ese error varias veces) que, por cierto, tienen que ganar sus partidos. Es Paraguay, que ya nos dieron un disgusto en el mundial de Francia. Siguen siendo defensivos, pero arriba tienen mejores jugadores arriba que antes. Será un partido difícil en el que un previsible y nuevo atasco nos puede dar disgustos.
Un saludo
Jesús (a.k.a. Abu)
No hay comentarios:
Publicar un comentario