El Atleti cerró el jueves el año con un partido muy superior a la media de lo vivido en los últimos tiempos. Se jugó al toque, Joao Felix se esforzó, Griezmann sigue en la misma línea participativa que le ha hecho muy interesante para su selección en el mundial y tuvimos un detalle de presente y futuro con Pablo Barrios. No diré que el resto fuera maravilloso pero tampoco desentonaron. El rival, con sus problemas, fue ordenado y salvo alguna llegada no fue de los que quiso buscar los nervios.
Poco más hay que contar. Un "a ver si...". Lo deportivo cuenta poco. La clave es quien más dejará el club para hacer caja o para liberar al Cholo de descontentos. ¿Con el propio Cholo o con algún incumplimiento de pagos de fichas o primas? Lo dejaremos en que el equipo no termina de explotar, ni siquiera de funcionar.
Personalmente no me queda más que esperar que aquellos que salgan sean los que están muy por debajo de las expectativas y que los que queden sean de los que creen en el grupo y en las señas de identidad. Ah, y como no confío que venga nadie de campanillas, confío en que lleguen jugadores medianos o sin nombre pero que vengan con hambre y cabeza limpia de malos rollos.
Vuelvo a Pablo Barrios. Me gustaría que estuviera más cerca del área, pero si se hace a ese puesto de dinamizador del centro del campo y lo sigue haciendo con esa intensidad, que no traigan a nadie. Eso sí, tendrá que estar más apoyado. Ojalá pueda arrastrar al resto y si se confía en algún otro chaval más bien estará. Desde luego, si el experimento sale mal, yo no le voy a culpar.
Cierro el tema deportivo mezclándolo con lo social. Me sobran los pitos. No me parece lógico que se pite a un jugador en juego, como Reguilón. No me convencía y no le hubiera traído. Pero salió al campo con ganas y en lo que estuvo, aportó ganas, entró duro y se fue hacia arriba con descaro. Pitarle por el pasado no va a arreglar nada.
Como tampoco arreglan nada los pitos al Frente por meterse con los propietarios. Veremos cuánto les dura. La broma de la comisión social tenía poco recorrido. Desde el año 1987 los Gil no han tenido en cuenta más designios que los de sus intereses. Un supuesto giro a la transparencia no era creíble y tras varios meses, es lógico que el personal se canse. Ganar tiempo y atajar las críticas hasta la próxima ocurrencia. Otro "a ver si..." y los que vengan.
Cerramos el año con el "a ver si..." mediático de la revolución para el año que viene, con o sin el Cholo y con o sin Joao Felix (cedido, traspasado, opción de compra obligatoria, temporal, sin ella...). Volvemos al equipazo para la historia con un jugadorazo incomprendido... Esto se puede aplicar a Cunha, Carrasco, De Paul, Lemar, etc. Por cierto, el Mundial de Qatar no les ha servido como escaparate...
Quizá sea cierto que el Cholo no sabe conectar con ellos. Que las sucesivas marchas como Vizcaíno y el Mono Burgos le hayan dejado más desnudo de lo que esperaba, pero el Atleti le debe muchísimo. No se puede vivir del pasado, pero se ha ganado mi confianza. Esperaré "a ver si..." da con la tecla, en lo que no confío es en "a ver si..." con otro entrenador se llame Luis Enrique, Tuchel, Marcelino o Bordalás todo funcione porque sí.
No, no ando sobrado de moral. A ver si en el 2023 se tiene ese grupo de partidos serios y feos que este equipo ha necesitado en otras temporadas y se explota, probablemente no para ganar la liga, pero sí para volver a tener buenos ratos y quien sabe si para tener un buen año en Copa por fin.
Lo que no es un "a ver si..." es mi mejores deseos a todos los que os acercáis a mí, en twitter, este blog, Instagram o en las previas en el Metropolitano, las Gaunas o en los podcast como Aplasta Arteche, el Doblete Radio o en la 7 de la Rioja. A todos gracias por aguantarme. El 2023, más de lo mismo, breve y sucinto pero con pasión. Lo fácil nunca fue lo nuestro.
Un saludo del Abu
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